La reciente crisis del ébola ha sido muy distinta a otras anteriores. Si en las ocasiones pasadas se había controlado rápidamente, esta vez se ha extendido por más de una docena de países, ha continuado durante más de dos años y ha dejado 13.000 muertos (si no más, pues en algunos momentos fue muy dificil controlar el número de fallecidos).
En nuestras pantallas de televisión, el verano pasado, tuvimos sobreinformación sobre la enfermedad, horas y horas de tertulianos que, la mayor parte de las veces no decían nada. Horas y horas dedicadas a mostrarnos siempre lo mismo, muy centradas en la víctima española y la enfermera contagiada, su perro y su evolució.
Sin embargo, dudo que la mayoría de nosotros sepa cómo se produjo el primer caso, quiénes fueron los más afectados, por qué se llama ébola a la enfermedad, qué goles nos colaron los medios de comunicacion cuando nos estaban hablando de ellos… Tampoco sabemos cómo se organizaron algunos países (Senegal y Nigeria son dos casos paradigmáticos) para controlar el virus en sus fronteras de manera rápida y eficaz.
No sabemos casi nada, así que por eso os recomiendo el libro «Detrás del ébola. Una aproximación multidisciplinar a una cuestión global«, (Ediciones Bellaterra). Coordinado por Oscar Mateos y Jordi Tomàs, el libro aborda temas muy diferentes en cada capítulo y aporta luz sobre muchas cuestiones que, en general, se han tratado poco.
Cabe destacar la reflexión de Jordi Tomás sobre Autoridades tradicionales, dinamismos cultural y ébola; el capítulo de Ana Álvarez sobre La dimensión de género en la crisis del ébola, donde queda claro cómo las mujeres sufrieron especialmente por su labor de cuidadoras y encargadas de la limpieza; y el dedicado a los Medios de comunicación en el tratamiento internacional de la crisis del ébola, elaborado por el recientemente fallecido profesor José Carlos Sendín Gutiérrez. Pero, sobre todo, me parece imprescindible el análisis de Jordi Serra-Cobo, en el capítulo sobre Factores ecológicos y socioeconómicos de la epidemia de ébola, en el que intenta explicar cuáles son las causas de una epidemia como ésta (de origen animal), teniendo en cuenta los cambios ambientales y socioeconómicos que se están produciendo en el África subsahariana. Por ejemplo, la deforestación de determinadas áreas de selva, que estaría facilitando el contacto de las personas con animales que hasta ahora se encontraban en zonas difícilmente accesibles, como podría ser el murciélago, reservorio del virus del ébola según casi todas las investigaciones. Cuestiones a tener en cuenta para evitar posibles crisis similares en el futuro.
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