Dakar es la protagonista única del último número de Altaïr Magazine, publicación histórica de las revistas de viajes (nació en 1991) que ha conseguido hacer frente a la crisis reinventándose en modo digital, aprovechando las posibilidades que ofrecen el vídeo y las infografías, entre otros recursos. Continuando con su tradición de dedicar números monográficos a ciudades o territorios singulares, en esta ocasión Altaïr propone un especialísimo recorrido por la capital de Senegal, y lo hace de la mano de escritores ya consolidados y jóvenes artistas del país.
Boubacar Boris Diop, Ken Bugul, Cheikh Fall y Adama Paris son algunas de las plumas que participan en este número en el que se habla de música, cine, política, urbanismo, historia y moda entre muchos otros temas, acompañados siempre de las impactantes imágenes del fotoperiodista senegalés Mamadou Gomis.
Un mapa interactivo nos lleva por las callejuelas y centros de interés de la ciudad, comenzando, cómo no, en la estación de ferrocarriles, punto neurálgico de la ciudad, del que nos habla Ken Bugul a través de su texto ‘Recuerdos de una niña de provincias’, en el que rememora su primera visita a la capital, muchos años atrás: “Dakar tenía que estar en una región lejana en la que vivían seres extraordinarios, diferentes de los habitantes de mi pueblo. ¿Quizás Dakar estaba en otro planeta? Salía de mi pueblo con mi imaginación vagabunda en bandolera para ir a esa ciudad de la que la gente hablaba con admiración”.
El recorrido nos dirige a la Caja de Ideas de Wakh’Art, un centro cultural en el que se llevan a cabo exposiciones, rodajes, conciertos..; la Isla de Goré, las playas de Fann, la Universidad o el Instituto Fundamental del África Negra, donde se exponen, entre otras, las obras de la Bienal de Arte de Senegal.
Muy presente está también la Historia de esta ciudad, desde tiempos coloniales hasta hoy. Boubacar Boris Diop describe esta evolución en un texto muy combativo, llegando a calificarla de fiasco urbano (“Dakar se ha convertido en esta megalópolis, engullida por un éxodo rural masivo, con barrios periféricos que crecen como setas); Abdou Khadre Gaye nos habla sobre los 100 años de la Medina y Oumar Ndao nos trae las historias de sus rincones y ciudadanos.
No podía faltar, claro, una referencia a dos de las personalidades más importantes de la historia de Senegal: Cheikh Anta Diop, científico y antropólogo, y Léopold Shédar Sengor, político, poeta y ‘Padre de la nación’. Dos personajes coetáneos que vivieron enfrentados intelectual y personalmente. De ello se encarga también Boubacar Boris Diop, en un texto interesantísimo en el que enfrenta las personalidades y trayectorias de ambos: “Diop fue uno de los raros líderes políticos senegaleses que rechazó el poder tantas veces como Senghor se lo ofreció (…) Denunciaba una independencia puramente figurada en un país donde la asistencia técnica francesa, constituida en ‘gobierno paralelo, conservaba el verdadero poder”.
Muy interesante también es el texto de Daouda Cissé (investigador en relaciones económicas y políticas entre China y AFrica) que retrata la historia, la vida y el día a día de los chinos que desde los años 80 del pasado siglo se han ido instalando en Senegal.
Además, este número no dejade lado cuestiones de actualidad, como lo que escribe Cheick Fall sobre la movilización en redes sociales contra el ébola; el movimiento Y’en a marre (Ya basta) , y los proyectos que cada día nacen en una ciudad vitalista y repleta de jóvenes con ganas de hacer cosas: Ya sea moda, arte, lucha senegalesa (uno de los deportes rey del país, similar a la lucha canaria), turismo o cine, como el cine para los barrios, a través del Espacio Ciné Banlieu, un espacio para la creación y la formación en el mundo audiovisual, creado en las afueras de la ciudad, por Keba Danso, el autor del artículo.
En definitiva un profundo paseo por el Dakar más actual sin olvidar su pasado, sin centrarse sólo en las dificultades del país pero sin evadirlas y, sobre todo, dando voz a los propios escritores senegaleses para poner en palabras lo que es este “caos con apariencia armónica”, que es Dakar.
puedo comprar números sueltos? Me interesa el de Dakar. Gracias
Hola Nieves!
Estos reportajes están online, pero hay que ser suscriptor para leerlos. No sé si existe la posibilidad de suscribirse para un número concreto.
Yo no te puedo ayudar, porque éste es un blog distinto a Altäir, pero seguro que ellos te informan: suscripciones@altairmagazine.com
Un abrazo,
Aurora