Esta es la escena que más me gusta de todas. Desde que llegamos aquí, nos hemos mantenido firmes en que en esta ciudad no existe transporte público. Es lo que nos habían contado y contamos nosotros al resto del mundo. Es lo que dijeron los enviados especiales cuando vinieron a cubrir la Copa Confederaciones y es lo que dirán cuando vuelvan para el Mundial. Pero, ¿es la verdad?
[Las imágenes parecen decir lo contrario. Arriba, una fila de hombres y, sobre todo, mujeres, esperando su transporte público. A la derecha, dos autobuses a las 8 de la mañana. Y abajo, un montón de kombis en fila cogiendo y dejando gente].
La realidad es que cada día millones de sudafricanos se desplazan en transporte público a sus trabajos, al médico y a visitar a sus amigos. La realidad es que sí existe transporte público, pero también es cierto que no es bueno. No es de calidad, no es barato, no satisface las necesidades de la gente y, parece ser, tampoco es muy seguro.
El Gobierno está intentando establecer un sistema público eficiente y para ello se ha tenido que enfrentar a los conductores de kombis, que se han manifestado, han hecho huelgas y, en algún caso, han llegado a apedrear a los nuevos autobuses públicos, pero poco a poco el transporte público va mejorando.
Ahora sólo falta que empecemos a usarlo.
Qué bien, ¡seguro que es un viaje estupendo! ¿Qué vas a hacer exactamente? Por favor, manténnos al tanto desde tu blog.
Un beso
Se dicen tantos disparates sobre África…
La suerte es que ahí estamos para informar que lo que se dice no es verdad.
Un abrazo!
PS. Casi estoy preparando la mochila para un viaje de dos meses por África oriental y R.D. del Congo.