Después de siete días enteritos contigo, solos pero con mucha gente, hoy te echo de menos. Mucho de menos.
[Ruinas de Gedi. Siglo XIII. Los árabes también dejaron su impronta en África]
Nuestro amigo el alemán decía que “nothing is easy in Africa” y tiene toda la razón, pero contigo todo es mucho más fácil.
Con nadie más habría hecho 600 km. en un día para ver un isla perdida que de paradisíaca no tenía nada. Y con nadie más habría sido tan fácil.
Nadie cambia una rueda en 15 minutos en medio de un camino infernal mientras desempolva su inglés para entablar conversación con un pobre kenyata que del idioma de Shakesperare no tiene ni idea.
Nadie hace un viaje de 24 horas entre aviones y esperas para tan sólo una semana y llega a Nairobi fresco como una rosa.
No te preocupes por nada, que al final todo sale y, aunque no será fácil, saldrá bien. Ya lo verás.
Auro, especialmente a ti te lo tengo más que dicho: sois una pareja envidiable. Que nada pueda con vosotros.
Rubén es un novio excepcional y seguro que tiene muchas más sorpresas para ti. Porque cultivar el amor… ¿No puede ser otra cosa que sorpender a tu ser amado?
Jamás pensé en leer algo así en tu blog. Miles de besos para los dos. Os quiero.
ains, qué bonito!!!
Yo tampoco habría podido hacer todas esas cosas si no hubieras estado tú conmigo!
para mí también ha sido un viaje genial y espero repetirlo pronto.
Además, gracias a nuestro CD de música swahili, entablar conversación con aquél chaval que nos ayudó a cambiar la rueda fue un camino de rosas, jeje
Yo también te echo ya de menos, pero está claro que si estas largas esperas tienen como premio experiencias de este tipo, bienvenidas sean! aunque, eso sí, sólo por un año! jeje
Muaakkk